El periodista Jorge Lanata analizó el revés que ayer sufrió el proyecto de Ley Ómnibus del gobierno, en “Lanata Sin Filtro”, su programa en Radio Mitre. En un ping pong de ideas sobre lo ocurrido junto al conductor Eduardo Feinmann durante el pase. “El gobierno está esperando, capaz, demasiado de la oposición, y la oposición no está dispuesta a dar todo lo que están esperando de ella”, analizó Lanata, quien además consideró que es “un delirio” que el gobierno “esté llamando llamando ‘corruptos’ a los mismos tipos con los que negociaron”.

 “Esto era lo que veníamos diciendo cuando empezó el Gobierno de Javier Milei. Venía todo demasiado bien hasta ahora”, opinó Lanata. “Lo que está pasando es lo lógico”, agregó. 

Según expresó el periodista, es lógico que “los sectores más corporativos se defiendan y traten de seguir en su negocio”.

Y agregó: “No digo que esté bien pero tiene sentido que esté pasando, no es fácil. Van a tener que encontrar alguna manera que esto cambie, no sé cuál es, porque no es fácil dentro de la ley pero alguna manera que esto cambia para poder llevar adelante lo que quiere”.

Respecto a la lista de “traidores” que publicó la cuenta oficial de X del presidente, donde acusa de traición a todos los legisladores que no acompañaron su proyecto, Lanata opinó que se trata de “un lenguaje bien peronista”, pero que “es nuevo que sea un escrache con nombre y apellido”.

“Ni con Cristina Kirchner ni con Néstor”, llegó a acotar Feinmann. “Creo que el gobierno no se deja ayudar. Es lo que sienten los opositores. Negocian, llegan a un acuerdo y después te ladran, te muerden la mano, te dicen traidor, extorsionador”, agregó en conversación con Lanata. 

Tanto Lanata como Feinmann consideraron que la estrategia del “todo o nada” del gobierno fracasó. “Y ahora vuelven con el todo o nada, que para mí este es un problema. Siempre todos los gobiernos cuando asumen creen que tienen la votación entera que tuvieron en la elección. En un momento Macri pensaba que tenía el 41 % y que lo iba a tener siempre para él, y tampoco es así. Tenía el 41 en determinado momento pero no lo iban a tener toda la vida. Esta gente también, tuvo el cincuenta y pico y lo va a tener hasta determinado momento, pero no para siempre. Hoy ya estaba viendo encuestas que dan que empezó a bajar. Acá hay que pensar que cuando uno asume el gobierno el reloj empieza a andar al revés. Entonces, tenés que tener resultados porque si no vas en contra, y es complicado porque después no tenés más tiempo para revertirlo. Lo perdiste”, sentenció el periodista.