La diputada de La Libertad Avanza (LLA) Rocío Bonacci fue quien presentó el proyecto de derogación de la ley de legalización del aborto, el cual generó cuestionamientos de ámplios sectores de la sociedad civil así como también desde referentes políticos como la diputada de UxP Cecilia Moreau y la del Frente de Izquierda, Myriam Bregman.
“El proyecto es mi iniciativa no del Ejecutivo y ha sido puesto a la consideración del cuerpo que integro. Defiendo la vida. Ni más, ni menos”, expresó Bonacci desde su cuenta de X ante las consultas de seguidores y rumores de que el mandatario libertario no estaba al tanto de la propuesta de derogación de la ley del aborto.
Rocío Bonacci tiene 27 años, es oriunda de Funes, provincia de Santa Fe. Se presenta en sus redes sociales como técnica en Podología, emprendedora y diputada nacional por La Libertad Avanza.
Desde el 10 de diciembre es la legisladora más joven de la Cámara. Si bien ha dicho en entrevistas que prefería no definirse como política, alegó que su participación en la gestión pública era “para acompañar la construcción de una alternativa que produzca un cambio profundo”.
“No me gusta la política como la vemos hoy (..) Nada de esto nos da ‘esta política (…) Si me preguntás si soy ‘política’, te voy a decir que no, no me interesa. Quiero sí acompañar la construcción de una alternativa que produzca un cambio profundo, que nos permita vivir mejor”, afirmaba.
Es hija de José Bonacci, exconcejal rosarino (2001-2005) y principal referente del partido Unite, que dio soporte electoral a Javier Milei en Santa Fe. Su madre es Beatriz Brouwer, quien ingresó en las boletas de LLA como diputada provincial por Somos Vida, espacio encabezado por Amalia Granata. Sus padres de conocieron militando en el partido Modin de Aldo Rico.
“Ella era cabo en comisión del Ejército Argentino como enfermera militar y él, impresor”, contó Rocío. Además, su madre participó en los levantamientos de Campo de Mayo.
Su padre, en 2011, se postuló a la presidencia por Partido del Campo Popular (PCP), una reconversión del viejo Modin. Se definía como un político ecléctico, “nacionalista, desarrollista y republicano”.
El abuelo de Rocío Bonacci era peronista y su abuela, radical; en tanto su bisabuelo era “fascista”. “En la mesa del comedor de mi casa he escuchado sobre la política de Santa Fe y del país durante 20 años, estuve presente en el momento en que todo esto empezó con la candidatura de [José Luis Espert] a presidente y también ayudando a armar bolsas de boletas electorales”, contó Rocío Bonacci al medio santafesino La Capital.
Sus padres querían que fuera abogada, pero ella decidió seguir kinesiología. “Después encontré una veta económica interesante en la manicuría. Mi papá me dijo entonces: ‘No importa, no hay trabajo indigno, aunque seas recolectora de residuos lo importante es que tu calle sea la más limpia’”, detalló en aquella entrevista. Y llegó a tener su propio local de manicura y podóloga en la ciudad de Rosario.
La diputada libertaria votó a Mauricio Macri en 2015, algo que según dijo iba en contra del mandato familiar. “Mi primer voto fue por el cambio. Fue por Macri y me defraudó. Yo voté diferente a mi papá, como muchos otros jóvenes que van a contramano del mandato o de la tradición política de sus viejos”, dijo.
Según el punto de vista de la diputada, “Se necesita urgente una reforma política de verdad, la implementación de la boleta única, la prohibición de aportes privados a las campañas electorales, la posibilidad de presentación de candidaturas independientes, un sistema electoral más transparente, la revocatoria de mandatos y la prohibición expresa de que los funcionarios sean candidatos”. “No puede ser que el voto sea un cheque en blanco y que un ministro use su ministerio como un partido político y haga campaña con ‘la nuestra’. Es infame”, sentenció.
Bonacci destaca que Milei es un líder transparente. “Milei es lo que ves, su principal capital político es su palabra. Mi compromiso es ser ‘leal’ pero no solo a una persona, porque no soy personalista, sino al compromiso que Milei tomó: ‘devolverle el poder al pueblo’. Además, estar con Milei es un imperativo de mi generación y no es que somos de derecha… es que lo que nos dejaron no sirve para nada”.