El presidente Alberto Fernández visitó este lunes la ciudad costera de Miramar, en el municipio de General Alvarado. Allí visitó un establecimiento de consulta del Ministerio de Desarrollo Social, recorrió la playa deportiva e inauguró una cancha de hockey que financió el Estado por 48 millones de pesos.
Al arribar en los vehículos presidenciales, cientos de personas lo recibieron con insultos y silbidos. Entre los descalificativos, una de las personas que grababa la situación gritó: «Chau, ladrón. Hijo de put*». Mientras tanto, el transporte de Alberto Fernández pasaba escoltado por los patrulleros de la Policía Federal.
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En la secuencia se escuchan múltiples gritos contra el mandatario argentino, cuando el mismo se dirigía hacia la polémica inauguración. Esta construcción en Miramar Rugby Club, es una de las tantas financiadas por el Ministerio de Turismo y Deportes, bajo el programa «Clubes en Obra».
En el plan nacional, que benefició a 1.200 municipios y más de 3.800 clubes, el Estado lleva gastado más de 2.300 millones de pesos.
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