El reconocido músico Phil Collins fue tomado por sorpresa cuando su tercera esposa, Orianne Cevey, le escribió un decepcionante mensaje de texto: «Encontré a otra persona y me gustaría intentar ver si puedo volver a ser feliz». La información fue revelada por el portal británico The Sun.
La relación entre Phil y Orianne fue turbulenta: se casaron en 1999, tuvieron dos hijos (Nicholas, de 19, y Matthew, de 15) y se divorciaron en 2008. En 2015 volvieron a juntarse. Hasta noviembre de 2019, se dejaban ver como pareja de manera pública.
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Ahora, ella decidió terminar la relación y empezar un nuevo vínculo amoroso con el guitarrista Thomas Bates. Sin embargo, la flamante pareja pasó tiempo en una casa de Miami Beach que Phil Collins aduce que le pertenece, y que, dice, fue «invadida» por los tortolos.
En ese sentido, los abogados del excantante y guitarrista de Genesis explicaron que “se necesita urgentemente una orden judicial para poner fin a una ocupación armada y la toma de posesión de la casa de Phil Collins por parte de su ex novia y su nuevo esposo». Además, argumentan que Cevey amenazó con hacer públicos documentos y declaraciones que “serían perjudiciales” a la imagen de Collins, a cambio de una gran cantidad de dinero.
Esta no es la primera vez que el artista de 69 años termina una relación de manera abrupta: el afamado compositor fue acusado de abandonar a Jill Tavelman, su segunda esposa, a través de un fax.