En los últimos días, el mundo se conmocionó con la condena a muerte del jugador iraní de fútbol, Amir Nasr-Azadani, tras haber participado de protestas por los derechos de las mujeres en su país. «Frenemos la ejecución» fue la consigna que todos utilizaron en las redes para llevar un mensaje al régimen de los ayatolas e imponer una presión internacional.
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El reclamo por evitar el asesinato del jugador iraní de 26 años se volvió masivo y ya se juntan firmas para establecer el pedido a las autoridades. Esto se da en un contexto difícil para la sociedad iraní. Desde hace algunos meses, las protestas por los derechos de las mujeres se hicieron constantes en la República Islámica tras lo sucedido con Mahsa Amini, una joven que había sido detenida por la Policía de la Moral por usar “incorrectamente” el velo y que -más tarde- apareció muerta en prisión.
El jugador iraní participó activamente en estas multitudinarias manifestaciones, por lo que las fuerzas de seguridad lo arrestaron y fue condenado a muerte por la justicia del país. Ahora, el reclamo internacional se encuentra en la plataforma www.change.org, donde se juntan firmas por la causa y se expande aún más el pedido.
Además del rechazo y repudio general, la Federación Internacional de Asociaciones de Futbolistas Profesionales (FIFPRO) también se pronunció y solicitó a las autoridades de Irán que detengan la sentencia y quiten la pena contra el futbolista.
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“FIFPRO está conmocionada y asqueada por las informaciones de que el futbolista profesional Amir Nasr- Azadani se enfrenta a la ejecución en Irán después de hacer campaña por los derechos de las mujeres y las libertades básicas en su país. Nos solidarizamos con Amir y pedimos la eliminación inmediata de su castigo”, esboza el comunicado de la organización.
Amir Nasr-Azadani ya fue condenado, pero aún no hay detalles sobre su posible ejecución en los próximos días, por lo que la tensión y la incertidumbre crecen con el paso de las horas. En el caso de que las autoridades iraníes no acepten los reclamos internacionales, Amir será el tercer ahorcado en público por protestar a favor de los derechos de las mujeres en todo Irán.
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