Este martes, luego de casi cinco días prófugo, fue detenido el joven de 25 años acusado de asesinar a tiros a Rocío Magalí González, una compañera de trabajo en un local de ventas de alarmas y monitoreo en Saladillo. La víctima lo había denunciado previamente por acoso y maltrato. El arresto tuvo lugar en un campo cerca del partido de Las Flores, tras una intensa búsqueda policial en la zona.
Con el objetivo de prevenir incidentes en Saladillo, el acusado será alojado en la comisaría de Rauch y estará a disposición de la fiscal Patricia Hortel, encargada del caso, quien lo interrogará en las próximas horas.
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El femicidio ocurrió el pasado jueves en el local Carletti Servicios. El agresor llegó fuera de su horario laboral y se dirigió directamente a la sala de monitoreo donde trabajaba Rocío. Sin mediar palabra, sacó una pistola y disparó al menos siete veces, hiriendo gravemente a González, quien posteriormente falleció en un sanatorio local.
Fuentes judiciales revelaron que la víctima había presentado denuncias contra el agresor a fines de 2022 y en mayo de este año por maltrato, acoso laboral y violencia psicológica. Sin embargo, las denuncias se realizaron en el fuero civil, no penal, por lo que fueron remitidas a un Juzgado de Paz que tomó medidas cautelares.
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El agresor escapó de la escena del crimen en una motocicleta y luego la abandonó en un campo, continuando la fuga a pie. Según una tía de la víctima, el ahora detenido había amenazado a Rocío dos días antes del femicidio, diciéndole que «disfrutara porque ya le quedaba poco». Según relató la mujer, el agresor tenía todo planeado y premeditado, ya que Rocío no tuvo tiempo de activar el botón antipánico que tenía debido a las denuncias previas en su contra.
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