El senador nacional de la UCR, Martín Lousteau, criticó al PRO, liderado por Mauricio Macri, acusándolo de anteponer su interés por el poder por encima de cualquier otra consideración. «Se ve que la apetencia del PRO es formar parte de la próxima etapa de recambio del Gabinete. Hay algunos que quieren estar en el poder, independientemente de quién tiene el poder», señaló Losteau, en referencia a la posición del bloque que lidera Mauricio Macri.
En este marco, el senador expresó su preocupación por la aparente disposición del PRO de respaldar cualquier medida, sin importar sus implicaciones, con tal de asegurar su presencia en el Gobierno, ya sea en el presente o en el futuro.
El enfoque pragmático del PRO, según Lousteau, reflejó una falta de principios y una búsqueda desesperada por mantenerse en el poder, incluso a costa de aliarse con fuerzas políticas con las que no comparte una verdadera afinidad ideológica. Esta crítica no solo pone en tela de juicio la integridad del PRO, sino que también plantea interrogantes sobre la estabilidad y coherencia de cualquier coalición o alianza en la que participe.
El senador de la UCR no se limitó solo a cuestionar al PRO, sino que también señaló la postura del presidente Javier Milei, a quien acusó de incitar un nivel de violencia alarmante: «está empezando a demostrar que está dispuesto a jugar por el filo externo de las reglas democráticas», detalló.
«Veo la tendencia de elegir un enemigo y movilizar a la parte del electorado de él en función de esa dialéctica. El Presidente está incitando un nivel de violencia inusitado», añadió.
Y se quejó de las publicaciones que tuitea o replica Milei en sus redes sociales: «Trata de infundir temor para que las opiniones en contra de él se sosieguen o desaparezcan».
Lousteau también destacó la presencia de exfuncionarios del Gobierno de Macri en la actual administración, como el ministro de Economía, Luis Caputo y la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, señalando que esta situación refleja una continuidad entre ambas gestiones, lo que calificó como «macrimileísmo» o «mileimacrismo». El legislador subrayó la falta de renovación y la persistencia de viejas prácticas políticas que el electorado podría estar deseando superar.
En cuanto al fracaso del proyecto de Ley Ómnibus en la Cámara de Diputados, Lousteau denunció que el Gobierno parece tener una agenda privatizadora sin contemplar adecuadamente las consecuencias de sus acciones. Advirtió sobre el peligro de otorgar un poder absoluto al presidente, argumentando que el reclamo de darle carta blanca en todas las decisiones es peligroso para la democracia y puede conducir a abusos de poder.