La directora de Borderperiodismo, María Julia Oliván, se refirió este sábado a las declaraciones que hizo en la semana el presidente de la Nación, Alberto Fernández, acerca de los chicos con discapacidad, a quienes describió como «chicos con capacidades diferentes«, y a los que acusó de no acatar los protocolos contra el COVID-19 por no «entender» la «dimensión del problema sanitario» que estamos viviendo.
«He hablado con maestros de colegios de chicos con capacidades diferentes… lo difícil que se les hace trabajar con esos chicos que no entienden la dimensión del problema sanitario que enfrentan«, dijo Fernández el jueves en diálogo con Radio 10.
Horas después, Oliván publicó una carta en #BORDER en la que señaló que su hijo está entre «esos chicos» aunque no asiste a una escuela especial, e indicó que ellos «y los otros, los neurotípicos, vivieron un día muy triste» tras la suspensión de clases presenciales.
Ahora, en el programa La noche de Mirtha, la cronista volvió a manifestar su malestar con las expresiones «despectivas» del primer mandatario acerca de los niños con discapacidad. Además, explicó que es «la primera vez» que Fernández «menciona el tema». También se quejó porque el presidente no reorganizó el trabajo de los terapeutas en el año de la pandemia. En ese sentido, explicó que «las personas con discapacidad tienen una crianza compartida. Cada niño depende del padre, del terapista ocupacional, trabaja con un neurolingüista, con un acompañante terapéutico«, señaló.
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Además, la conductora reclamó que «nadie del gobierno» atendió el tema, y precisó las dificultades que pudo tener, por ejemplo, un chico con hiperactividad durante el encierro: «¿A nadie se le ocurrió en el gabinete de científicos decir: qué hacemos con la discapacidad en la pandemia, además de encerrar a los chicos en la casa? ¿La única mención que hace el presidente es: no bueno, estos chicos no entienden? Señor presidente, si no entienden, se lo tienen que explicar en el colegio o los terapeutas. Si usted le saca los colegios y los terapeutas, los padres reventamos, es muy difícil de sostener«, agregó.
«Los padres aprendimos, porque vimos lo que pasó con nuestros hijos en este mes de clase. Vimos a todos los chicos que habían tenido regresiones en su desarrollo, vimos a los chicos que estaban aislados, porque la depresión en los niños se expresa con situaciones de violencia o de agresividad. Los vimos cambiar, los vimos reconectar, los vimos generar vínculos. Los padres también aprendimos que nosotros queremos que los chicos estén en la escuela», concluyó Oliván.